Del 6 de abril al 15 de junio de 2024

De jueves a viernes de 18 a 20 h.

Sábado de 11 a 13 h y de 18 a 20 h.

Festivos cerrado excepto 30 de marzo y 17 de mayo.


INAUGURACIÓN: SÁBADO 6 DE ABRIL

El Convent, Espai d'art, Calle Hospital, 5. Vila–real, Castellón.

Marina Iglesias (2018)

Paradojas de la imagen bélica

Este proyecto comienza a raíz de dos motivaciones fundamentales: la infinidad de posibilidades que ofrece la experimentación plástica y la investigación del engaño que reside en las imágenes, como fruto de la confianza ciega que depositamos en ellas. Así, y desde la exploración matérica de la pintura, busco indagar en la razón que hace que ciertas imágenes capten mi atención y que otras, sin embargo, pasen desapercibidas.

A partir de este punto decidí centrarme en la búsqueda de imágenes de tipo bélico o periodístico. Entre otros aspectos que me interesaban de esta clase de fotografías, lo primero en lo que me fijé fue en que muchas de ellas aparecía un mismo elemento visual repetido: el uniforme del soldado, elementos arquitectónicos y aeronáuticos u otras vestimentas que se caracterizaban por su homogeneidad fueron algunos de estos motivos. Observé que, en estos casos, la repetición de una imagen concreta era capaz de erradicar la personalidad individual de un elemento aislado e instaurar en su lugar otra identidad plural. Surge así un concepto nuevo: la idea de grupo, de pertenencia a algo que va más allá de los límites del individuo.

Así, este fenómeno visual que relaciona sujeto y sociedad se convirtió en el hilo conductor que me llevó a cuestionarme el origen de dichas imágenes. Me di cuenta que la repetición de un mismo elemento es algo puramente manufacturado, y en consecuencia, un producto cuyo origen es premeditado.

Fue en este momento cuando comencé a prestar una mayor atención a las imágenes que estaba buscando y, además de los sujetos que aparecían en ellas, empecé a fijarme en qué escenarios estaban localizados. Percibí entonces que gran parte de estos espacios eran naturales y que, por consiguiente, nada era producido y ningún elemento se repetía. Se trata de lugares orgánicos en los que cada componente visual es único y se relaciona con otros generando una maraña complicada, todo lo contrario al carácter simple y manufacturado de los uniformes y las máquinas en los que me había centrado anteriormente.

Esta relación paradójica entre la aparente simplicidad de lo manufacturado que se repite y la imagen complicada de lo orgánico e irrepetible supuso otro punto de partida del estudio de este mismo tema. Empecé a investigar plástica y visualmente qué suponía una y otra cosa, y me despertaba curiosidad esa relación entre componentes contrarios que se daba en un alto número de imágenes de carácter bélico. A raíz de esta idea decidí utilizar también otro tipo de referente visual diferente al que estaba empleando y seleccioné otra clase de imagen en la que un solo elemento producido se presentaba como algo orgánico a través de planos más cercanos que capturaban en ellos formas complicadas e irrepetibles.

Otro aspecto que captó mi interés fue el camuflaje, precisamente porque es en el uniforme camuflado donde se intenta emular esta complejidad natural, hacer simple lo complicado. Esta ambigüedad formal entre elementos antitéticos me llevó a probar con diferentes formatos, a relacionarlos entre sí, y a experimentar plásticamente cómo complicados paisajes naturales podían ser plasmados de manera que visualmente se acercasen al estampado de camuflaje.

También llamó mi atención cómo se ha percibido la figura del guerrero frente a la del soldado y es que, a pesar de estar separados entre sí por una línea muy fina, podríamos decir que el soldado siempre lleva a experimentar una realidad despersonalizada a través de la repetición de un mismo motivo y convoca así, a un conjunto visual. Sin embargo, el guerrero tiene personalidad única y su vestimenta va acorde a dicho carácter. No es de extrañar por ello que el guerrero samurái posea armaduras y máscaras únicas, pues destaca por sus cualidades irrepetibles.

Concebido como un proyecto que continúa en proceso de investigación, estas paradojas de la imagen bélica generan todo tipo de ramificaciones a través de la investigación de imágenes históricas y representaciones antiguas. Podría decir, entonces, que esta muestra no constituye un punto y final, sino que es la generatriz de otras experimentaciones plásticas. Así, el hecho de buscar entender porqué ciertas imágenes captan mi atención ha ido encauzando esta búsqueda hacia otro tipo de motivaciones y continúa haciéndolo.

Marina Iglesias